Primero:
Cuando entre o salga del dojo, mirando a la parte principal (Kanku, o Retrato de Sosai Oyama) salude y diga OSU, después en dirección al Dojo salude nuevamente y diga de nuevo OSU.
Segundo:
Cuando llegue tarde a clase, arrodíllese en seiza y mokuso en la entrada del Dojo. Cuando le den permiso desde seiza, salude diciendo SHITSUREI SHIMASU (perdón por llegar tarde). Póngase de pie saludando con un fuerte OSU y rápidamente únase al final de la clase. Aún así nunca llegue tarde, la puntualidad es una virtud.
Tercero:
Si debe moverse en clase, hágalo rápido, no se pasee.
Cuarto:
Nunca practique Kumite a menos que un instructor esté presente. Cuando practique kumite con un cinto negro debe hacerlo lo mejor posible pero mostrando respeto por su Senpai. Si piensa que puedes hacerlo más fuerte hágalo, pero recuerde que ellos pelearán al nivel de usted. No al límite de sus posibilidades.
Quinto:
No rompa las líneas por ninguna razón sin el permiso del Instructor. Nunca ande entre las filas o entre el instructor y los que entrenan. Si debe dejar su posición, lo hará siempre por detrás del grupo.
Sexto:
Nombre a su instructor como Senpai, Sensei o Shihan, según corresponda. No lo nombre por su nombre de pila en clase.
Séptimo:
No jure, se ría, hable, holgazanee o actúe desconsideradamente durante el entrenamiento y siempre esté alerta. Tener un grado alto (especialmente cinto negro) no es un ticket para el relax y la familiaridad en el dojo. No malgaste su tiempo ni el de sus compañeros. Aunque sea principiante, finalice la clase.
Octavo:
Su dogi debe estar limpio y esmerado a todas horas. Tu cinturón nunca debe ser lavado, contiene el espíritu de su duro entrenamiento.
Noveno:
Escuche cuidadosamente las instrucciones del instructor, recuerde que él no le pedirá nada que no haya hecho ya. Salude a todos los instructores con un fuerte OSU.
Décimo:
El respeto a su instructor es clave para su desarrollo marcial. Kyokushinkai comienza y termina con cortesía. Si no puede mostrar respeto a una persona que está gastando su tiempo en enseñarle, usted, no merece estar en un dojo de Kyokushinkai. Nunca cuestione sus órdenes, no hable en clase a menos que le pregunte el instructor. Tal obediencia desarrolla un lazo de confianza entre el instructor y el estudiante.
Undécimo:
Desarrolle antes del entreno una higiene corporal, a nadie le gustaría entrenar con alguien sucio. Asegúrese de ir al servicio antes del entrenamiento. Un golpe accidental en la vejiga llega puede ser extremadamente peligroso. Intente recordar también que no es bueno entrenar con el estómago lleno, no coma al menos una hora antes del comienzo de clase.
